lunes, 7 de septiembre de 2015

Pequeño Entretenimiento Carente de Sentido I

De las artes de admirar, 
no hay alguna más potente 
que tirarle a un niño un diente 
pa' que deje de llorar. 
Es que, póngase a pensar, 
¿si hay momento mas horrible?
El dolor indescriptible 
del dientecito colgando 
sólo se arregla halando, 
de otro modo es imposible.

Otra gran habilidad 
consiste en dejar salir 
sin menor ruido emitir, 
la pequeña obscenidad 
que demuestra humanidad 
con olores putrefactos. 
Y es que muchos no son aptos 
en el arte de ocultar, 
y parecen ignorar 
el poder del "artefacto".

De las artes más humanas 
que podemos encontrar 
es injusto aquí olvidar 
otra de las más marranas. 
¿Es de hombres tener ganas 
de dejar siempre charquitos? 
¿No se puede miar poquito?
¿No se puede ser decente,  
pensar en la otra gente 
ni apuntar bien el chorrito? 

Siendo un divertimento, 
no me siento obligado 
a quedarme aquí sentado 
inventándome más cuentos.
Hasta que llegue el momento 
de volvernos a escribir.
Nada queda por decir. 
Me despido por ahora, 
pues me ha llegado la hora... 
es momento de dormir.

Esto es libertad.
Escribir es libertad.
07/09/2015