...otra vez oigo el silencio infinito
que queda después del asombro...
ese momento pequeñitico
cuando en suspiros te nombro.
Nombrar un poema con modismos
y acechar siempre a la rima ideal
sólo por dibujar un "mi mismo"
que se parezca menos al real.
Al real porque un dibujo me viste,
soy mancha borrosa y sucia,
y soy mugre de un mugroso fucsia
con negros y azules... y grises, muchos grises.
Grises que asfixian más que aquello,
que dan dolores de cabeza como aquellos,
que desconcentran a veces de aquello,
que no dejan hacer nada... ni aquello.
Aquello que busco a toda hora
y que parece correr despavorido
en cuanto me muestro decidido
a entregarme a una llama abrasadora.
Brasas que son luego ceniza
y ceniza que a carne se vuelve,
carne que me tienta, que me duele,
que arde, que quema... y otra vez: cenizas.
Cenizo como el pelo de la abuela:
centro de incógnitas recogidas
en una vida (tal vez en dos)
de dolores, de fuerza y de tos.
...y yo toso y toso. Y me quejo. Y miro
cómo se me escurre en los dedos la ilusión...
¡Deténganla que se me va, se escapa!
No dejen que siga su camino,
que camine conmigo, si lo quiere.
Amémonos de ilusionista manera:
tú disfrazada y yo inocente,
tú confiada y yo tan transparente.
Déja entrever tu transparencia
llena de rayones, como es...
Deja que la belleza sea al revés,
déjate ver así, sólo tu esencia... sólo tú.
¡Mírame, tú! ¡Déjame mirarte!
Deja que te toque y te conozca,
deja que consiga emocionarte
para no irte más de mi lado.
Dame, como hasta ahora, la poesía
vuelta plastilina para tapar huequitos
que aunque parecen pequeñitos
son hondos... dan miedo... enfrían.
Y de fríos para qué decir más...
para qué llamar frío a este viento
quedo y saludable por demás,
a este soplo con mote de "tiempo".
Porque tiempo no es el que pasa,
es el que espera, que se detiene
y regresa por algo olvidado en casa
y sigue luego pero sólo si le conviene.
Conviene ir atràs, en reversa, al contrario...
así voy, como siempre, en mi mundo;
disfruto, me río, me salgo, me inundo
y me importa un "pepinario"
si puedo rimar con inventos
o si tengo que seguir reglitas;
si puedo escribir mis maricaditas
(¡pero las mías!) ya está, estoy contento.
aaaaaaaaaaaaaaaaah.
12/05/2013