Y sin saber ni entender a dónde estoy llegando
con estos versos que verán a continuación,
deseo, humildemente, hacer la dedicación
a 3 pequeñas mujeres que me han ido encantando.
Es demasiado pronto para decir sus nombres
y dar a conocer sus bellas identidades,
pero como pistas, ahí van sus cualidades:
Eternas, amigas y hermosas. (Aunque te asombres)
Una es Anaisa, bella, baila y rima con paisa!
Otra, Catalina, dulce como colombina!
Y Natalia, la maj besha, y nada le salia!
Sólo quedará de este soneto mi disculpa.
Yo no me arrepiento, ni me siento responsable
pues de adorarlas, sólo ustedes tienen la culpa.
27/12/11