Esta noche ha decidido, luego de correr,
que era el momento justo para dejarse ver.
Y es así como la noche se quiso mostrar:
En forma de soneto sencillo de rimar,
con mucho infinitivo (cómo más iba a ser),
con ansias sinceras de llegar a sostener
una sonrisa que la logre "contentizar".
Se acabaron ya los versos de simple final,
ahora sólo queda una mirada simpática
que estira los carrillos de manera especial.
Y no queriendo aburrir con letra tan dramática,
reconozco en mi una mancha... ¡Risueña, real,
amable, gentil, coral... mancha monocromática!
04/08/2014