martes, 12 de mayo de 2015

Cortocircuitos III

Casi vivo necesítome. 
Por lo menos un poquito 
en lo que acabo el cuentito, 
al que tal vez no resístome. 

Resisto con las palabras 
que tengo que sujetar 
a la pata de mi cama 
para que no se me escapen. 

Porque escapar es, sin duda, 
la mejor versión de mi, 
la mejor versión de ti, 
la peor versión de Nos. 

¿Nos tratamos suavecito? 
Vamos a comer chatarra 
con un fondo bien amable, 
como el del arte moderno.

Modernizando las rimas 
pareciera yo imbatible, 
ay, qué idea más terrible.
Ya no riman ni los verbos. 

Ver bonitos los colores 
ya no es cosa del pasado, 
ya me siento renovado 
con el gris de mis amores. 

Amor gris y lamentoso 
supuran todos mis poros 
porque no puedo encontrar 
la dicha en mis mismos ojos. 

Mas, ojo con lo siguiente: 
Si me encuentran en un caño, 
si me ven medio muertito, 
con la lengua ya colgando, 

no me cuelguen, que seguro 
vuelvo yo en cinco minutos, 
mientras miro si está bueno 
en el cielo cualquier baño.

12/05/2015



Pequeña Petición a la Manera del Dorado Centurio.

-Sí Señor, muy buenas tardes, 
¿qué le podría ofrecer? 

- Un corazón, por favor. 

- Sí Señor, claro que sí. 
¿Asado o a la parrilla?

- Lo quiero más bien rojito, 
con sangre, bien jugosito.

- ¿Casi crudo?

                        - Casi vivo.
12/05/2015